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"Soy Cool porque odio Pókemon Go" o Cómo odiar en internet lo que no podemos tener

Desde que salió Pókemon Go ha sido calificado con todo tipo de adjetivos. Algunos lo han considerado una alternativa contra la obesidad, otros como una especie de incentivo a la integración social (leí un artículo donde decían que estaba incentivando a los pacientes de Autismo a comunicarse y hacer amigos), otros lo han llamado una nueva forma de control corporativo, un arma para controlar las masas y hasta los más radicales han llamado a este juego una señal demoníaca del apocalipsis. Muchos otros lo han llamado un juego para tontos y ése es el caso en el que me quiero enfocar hoy ¿Por qué necesitamos restregarles a otros en la cara que somos más maduros y adultos por no jugar un juego que todos sí? Simple. Porque no podemos tenerlo.

Bien sea porque no tengo el dispositivo para jugarlo (un teléfono inteligente no es asequible para cualquiera en Venezuela. Además el juego representa un poco de peligro jugarlo considerando el factor inseguridad) o porque tengo demasiados convencionalismos sociales o escrúpulos morales para hacerlo. Creo que el segundo caso es el más dañino y triste, porque son esas personas que se pierden de la experiencia simplemente porque les aterra el que los demás piensen que no son suficientemente maduros o "antimasas" para divertirse con un juego que significa para muchos alcanzar el sueño de la infancia: Ser un maestro Pókemon.



Recuerdo que cuando era adolescente no tuve consolas. Llegamos a tener un Play Station y ya. A ese le siguieron el 2, salió el X-Box, salió Nintendo Wii y casi 4 tipos de DS y el PSP. Ninguna de las personas que los poseía me pareció estúpida o inmadura; simplemente yo, por el momento no lo podía tener y ya. Aceptaba eso hasta que pudiese cambiarlo, sin atacar a nadie. Claro, en esa época no existían redes sociales, entonces mi opinión era otra entre un mar de opiniones sin relevancia para el entorno. Igual que ahora, solo que quizás con más ecos que la propagan.

Con la fiebre de Pókemon Go, así como las banderitas en Facebook, así como el perro de Snapchat, el resurgimiento de los zapatos Adidas clásicos, los chokers, las medias hasta los muslos y cualquier otra moda que se ha popularizado últimamente, surgen un montón de detractores que bajo la bandera de "Soy más maduro y menos sigue masas que el resto" parecen necesitar la constante aprobación de su entorno que el ser antimodas los hace geniales, "unicos y diferentes" como dicen por ahí; cuando, en realidad, parece un grito desesperado por manifestar que no se unen a la corriente porque sienten que todos pensarán mal cuando lo hagan o porque no se les ocurrió primero y se perderán en una marea de gente "unica y diferente" igual que ellos.



Yo creo que la posición más madura que han asumido las personas que se oponen a esta moda es la que, de hecho, han asumido algunos que es no comentar absolutamente nada. Sí, de hecho lo deja mejor parados... como la frase de la canción de los Beatles " vive y deja vivir".

Claro, a esto podemos añadirle la perspectiva totalmente opuesta pero no así menos ridícula que han asumido algunos de exigir un currículo para jugar un juego que a acaparado las masas y se ha convertido en una cosa del mundo entero. Decir que si no viste la serie de los 90's o si no has jugado X o Y juego no te hace digno de jugar Pókemon Go es inclusive más ridículo que el llamar tonta a la gente que lo juega. No solo porque puedes jugarlo calladito porque no eres tú quien saca provecho del juego y por ende dinero, sino porque es un grito desesperado de atención y porque te escuchas tan solitario y triste como los que dicen "Yo leí el cómic antes que se hiciese popular por ende soy más fan que todos ustedes".  Esa necesidad de secuestrar el fanatismo hacia algo negándoselo a otros o pidiéndoles un conocimiento basto y extendido como si saberse cuantas novias había tenido Stan Lee mientras escribía The Amazing Spiderman me hiciera más o menos fan del cómic es la principal razón por las cuales las personas externas a veces miran a la comunidad con recelo. Es la típica actitud de un niño cuando no quiere compartir sus juguetes; solo que este niño tiene ya más de 25 años.

Si usted es de las personas que considera "mongólicos, gafos, inmaduros, estúpidos" a los que juegan Pókemon Go  y necesita vociferarlo en las redes sociales entonces déjeme decirle que usted es un adulto solitario y triste con mucho tiempo que perder. Y si es de los que exige las 12 pruebas de Hércules para otorgar su santo permiso para jugar un juego que es de libre descarga, bueno amigo (amiga) busque una actividad porque el mundo no es suyo solo... o compre todos los derechos así juega usted solito y se evita los posers. 

La lección que encierra este artículo no es que por ley debe gustarte lo que a todo el mundo le gusta, es simplemente que si no te gusta algo (porque no todos debemos coincidir en todo) te mantengas callado en vez de ir por ahí vociferando cuán maduro eres por no seguir cierta moda. El hecho que tengas libertad de expresión no implica que debas usarlo todo el tiempo. De todas formas a quienes disfrutan el juego no les importa.

Kuro!



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