Ir al contenido principal

Entradas

El Proceso creativo es una mierda

      Mientras decido si revivir este blog, revivir el podcast o revivir ambos; hay muchas cosas que necesito reflexionar sobre cómo llevo mis procesos creativos y cómo estoy lidiando con el montón de ideas que se apilan en mis cuadernos (sí, aun llevo uno) que nunca logro concretar.
Entradas recientes

Separando a los monstruos de los hombres

Desde hace algunos meses, el mundo de las artes y el espectaculo parece enfrentar una purga... y de las buenas. Decenas de mujeres y algunos hombres se atrevieron a hacer lo que para esa cupula era impensable: hablar.  Lo ocurrido con este monstruo llamado Harvey Wenstein solo fue la punta del iceberg de algo que todos sabemos que ocurre, pero nadie se atrevia a hablar abiertamente de ello. El abuso y acoso sexual en Hollywood es una realidad palpable y real; que incluso el todo el dinero del mundo no pudo tapar por mucho tiempo.

Todos merecemos un amor como el de Gomez y Morticia Adams

Hace un tiempo, hubo una época en la que muchas parejas se sentían identificadas con Gomez y Morticia Adams. Creo que en esa época lo consideraba una tontería, pero ahora en medio de tantas parejas que se identifican y quieren imitar a parejas tan dañinas (y en algunos casos enfermizas) como Anastasia Steel y Christian Gray o peor, El Joker y Harley Quinn (Gracias, Suicide Squad, de verdad); reflexiono que querer emular a esta ecléctica pareja no es ni tan mala idea.

Expectativas: El pasto nunca es TAN verde del otro lado

Las expectativas son dañinas. Nos hacen ver cosas que no son o esperar cosas que posiblemente no sucedan. Nos hacen ver perfectos a los demás y nos resta valor a nosotros mismos; nos generan frustración y desdicha, nos aisla y nos hace sentir solos, nos va matando. Porque esperamos demasiado y recibimos tan poco que lo único que nos queda es la impotencia de “¿Esto era todo? ¿tanto esperar para… esto?”

Ansiedad 101

Desde hace meses no escribo en este blog... y me hizo mal. Y es que, en honor a la verdad es como faltar a terapia, o empezar a saltarte las dosis de medicamentos. Al principio crees que no pasará nada y a largo plazo te das cuenta que nunca debiste dejarlo.