Sé que les he dicho en artículos anteriores que siempre hay que mantenerse positivos, que siempre hay que tratar de mantener la compostura y que no importa lo que suceda, siempre debemos encontrarle el lado bueno para poder resolverlo de la mejor manera.
Pero hoy, precisamente hoy, siento que voy a tumbar aquel artículo con lo que voy a decir. Y es que usted está en plena facultad y derecho de molestarse y mandar a la mierda a todo el que se le atraviese cuando sienta que no aguanta más.
Ojo, no quiero decir con esto que usted deba ser el grinch; ni andar por la vida llevándose a todo el mundo por el frente porque se paró del lado izquierdo de la cama. Me refiero a que uno a veces, en la vida, pasa por episodios de furia, frustración, está de malas por muchas cosas, porque su trabajo no le satisface, porque su situación económica no es la mejor (Venezuelans, be like), porque le salió un grano en la cara, en fin; existen tantos motivos como personas que los tienen; pero uno no puede estar feliz el 99,99% del tiempo. Es enfermizo, absurdo y no es sano.
Hoy me pasó algo muy particular. Desde hacer varios días estoy inconforme con muchas cosas a mi alrededor, siento que la gente en vez de ayudarse a sí misma o ayudar a otros se dedica a descalificar, criticar y, siendo directos, molestar. Las redes sociales son el conducto más rápido de desahogo para muchas personas y por lo general acudo a ellas más rápido, pero en esta ocasión el tiro me salió por la culata. Porque alguien me pidió que "fuese más positiva".
Sin ánimos de ser grosera, las personas deberían pasar un lector por sus propios muros antes de intentar dar lecciones de moral a otros. No quiero decir con esto que el consejo de este amigo no haya sido apreciado... pero esa palabra me quedó haciendo ruido.
Yo me considero una persona bastante positiva. De hecho, creo que es condición indispensable para no acabar loco con la realidad venezolana. Pero, en ese momento, en ese preciso momento, no quería ser positiva, quería desahogarme porque francamente estaba hastiada de las críticas sin necesidad de gente que no está dispuesta a colaborar.... ¿Qué me lo tomo personal y voy a morir de un infarto? No precisamente, porque a veces necesitamos dejar salir lo que nos frustra.
Siempre he encontrado particularmente estúpido como se nos pide siempre una actitud ecuánime y "madura" todo el tiempo. Sobre todo, últimamente que las "conductas antiestrés" parecen estar de moda. Debemos quedarnos donde no queremos estar, tratar a quien no soportarnos, no permitirnos una molestia o un capricho porque eso es "inmaduro" y "mal visto"; es como si nos exigieran ser robots que no pueden sentir rabia o dolor. Solamente ser máquinas alegres y lógicas a las que nunca les frustra nada.
No quiero que se vayan al otro extremo; tampoco vivir enojado es sano. Mucho menos vivirán la vida armando escándalos, pero todo en su justa medida. Y si a veces usted le enoja algo, déjelo salir... así le pidan que "sea más positivo". Usted es el dueño de su rabia, usted contrólela... pero exprésela primero.
Lamentablemente, vivimos en una época de redes sociales donde tenemos que asumir la retroalimentación como un regalo, asi este no sea lo que querramos escuchar. Insisto en que aprecio mucho el comentario y el consejo. De la misma forma que reafirmo mi derecho a expresar mi inconformidad y molestia pues porque... es mía, yo la siento y necesito dejarla salir.
Este artículo no pretende justificar mis accesos de ira. De hecho, si... porque es necesario dejar salir lo que nos frustra. Yo prefiero mil veces pasar por una amargada sin remedio, que por una persona feliz que en realidad no lo es. Asimismo, liberar la rabia es terapéutico, tiene efecto analgésico... ¿o usted ha visto a alguien que después de golpearse el dedo pequeño del pie con el mueble le agradezca por lastimarlo?
Ahora, si sus accesos de ira son frecuentes, y amenazan con hacer daño a otros, si. Es necesario que usted se ponga en control y busque ayuda. No lo vea por el resto del mundo, piense en usted. Sus órganos - especialmente su hígado- se lo agradecerán.
Carlix
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