¿Que seria de mi.... sin mi?

Si, así mismo, porque por muy arrogante y prepotente que suene, últimamente me he dado cuenta de que no contamos con nadie más que nosotros mismos. No se me vayan de bruces, este no es el típico articulo emo en donde me quejo de porque la gente no merece la confianza que uno les da, ni una letanía de que la sociedad apesta y de que la humanidad da asco, eso lo he dejado varias veces en claro... simplemente como tenia tiempo que no escribía aquí y se me metió esto entre pecho y espalda, me di una pausa del perolero que tengo que estudiar para terminarme de graduar de ingeniero y ser productiva por primera vez en mi vida, para teclear esto, sacármelo de la cabeza y poder seguir configurando redes de Internet para que ustedes puedan ver porno o perder el día en facebook (empiezo con una nota ligera este post porque no se si mas adelante se ponga denso como el petroleo), así que aquí va.



Desde que tengo uso de memoria siempre se me habia inculcado que necesitamos de otros para alcanzar nuestros objetivos y que siempre es necesario alguien que nos apoye, anime y entusiasme a hacer las cosas, incluso, la TV me mostraba desde temprana edad que, como mujer, necesitaba crecer y buscarme un marido que me proveyera, protegiera y cuidara, porque una mujer no es nada sin un hombre al lado, que despues de los 40 años tienes que agarrar aunque sea fallo y que debes aguantarle todo a tu marido "porque asi es el amor".

No obstante, me he percatado que si, necesitamos de otros para alcanzar nuestras metas, pero no en el sentido en el que me lo enseñaron en el colegio, porque necesitas quien te ayude enseñándote lo que no sabes hacer (función que cumplen tus profesores), quien te enseñe a enfrentarte a la vida (función que cumplen tus padres) y con quienes hablar y compartir buenos momentos porque tampoco puedes vivir aislado socialmente (función que cumplen tus amigos y en dado caso, tu pareja), mas no porque de ellos dependes o porque necesitas materializar tu motivación para lograr lo que te propones.

¿Que quiero decir con esto? muchas veces ponemos las responsabilidades de nuestros sueños y anhelos sobre otros y esperamos que ellos los cumplan por nosotros; frases como "tu eres mi motivo para luchar" o "tu eres lo que necesito para ser feliz" e incluso "tu me das razones para vivir" me he percatado que demuestran una dependencia casi enfermiza hacia los otros, personas que vienen a nuestra vida a cumplir un ciclo, que así como llegan, pues deben irse y nosotros atando algo tan significativo como nuestra vida y nuestra felicidad a alguien que mas temprano que tarde va a tener que bajarse del tren (¿recuerdan aquella metáfora de que la vida es como un viaje en tren?). No quiero decir con esto que debemos volvernos unos seres agrios y solitarios de esos que no quieren ver a nadie ni vincularse con nadie porque nos bastamos y nos sobramos solos, no, tampoco quiero decir que vamos a creernos que somos mejor que el resto porque el trabajo en equipo es parte de alcanzar las metas que nos establecemos y no nos las sabemos todas mas una, sino que debemos saber desligar el vinculo que establecemos con aquellos que queremos de lo que queremos para nosotros, y, me atrevo a decir, de lo que nosotros esperamos y creemos de nosotros mismos.

Puede sonar un poco egoísta y mala gente decir esto pero, tenemos esa terrible costumbre de sufrir por los problemas de otros, problemas que no nos atañen, dicho sea de paso, en nombre de ese lastre sentimental al que llamamos "empatia"; palabra que estamos empleando mal, porque el que signifique ponernos en el lugar de los otros quiere decir que entendamos sus circunstancias sin juzgar, mas no que suframos y lloremos cargando con pesos que no son nuestros; porque son consecuencias de determinada acción que una persona cercana a nosotros hizo o dejo de hacer y tiene que estar dispuesta a asumir las consecuencias; suframos, lloremos o pataleemos mientras gritamos que la vida es injusta con fulanito o perencejo.

Aja, dirán ustedes, "has dicho un montón de cosas que ya yo sé y que cualquier psicólogo me diría , si, eso yo lo sé, pero además de que aquí se las digo gratis, puedo decirles que inconscientemente hacemos cosas que demuestran que somos tan emocionalmente dependientes de los demás, que podemos estar totalmente seguros de algo y basta que alguien cercano a nosotros (nuestros padres, por ejemplo) haga un simple gesto de desapruebo para que mandemos horas de reflexión y evaluación para el mismo diablo porque simplemente "mamá quiere lo mejor para mi y por ende debe estar en lo correcto así vaya en contra de mis deseos", hago la salvedad de que tampoco nos vamos a rebelar y aplicaremos la de Viva la Resistance, porque si somos tan varoncitos y mujercitas para tomar una decisión  debemos serlo para asumirlo hasta sus ultimas consecuencias y con todo lo que ella implica, si debemos aceptar un consejo o una sugerencia, mas no poner lo que los demás esperan de nosotros por encima de lo que esperamos de nosotros, de lo que queremos para nosotros y de lo que creemos de nosotros.

Ilustraré lo ultimo de una manera mas... didáctica; Menganita salio con Fulanito y ella se sintió bien con él hasta el punto que se besaron y se tocaron un poco... Menganita se lo cuenta a Susanita, su mejor amiga quien le dice que esta decepcionada porque se portó como una zorra porque ella esperaría hasta la tercera o cuarta salida para siquiera darle un beso a Fulanito; entonces Menganita se deprime y se siente la persona mas sucia y cochina del mundo porque en ese momento se sintió bien besarse con el muchacho, pero ahora Susanita esta decepcionada y por ende, ella no sirve como persona. ¿Por que pasa esto? cuando tomamos una decisión en determinado momento, pero al comunicársela a alguien, que la desaprueba y nos reprocha por ello, y de paso, nos deprimimos porque la persona no aprueba lo que decidimos, estamos demostrando que lo que dice esa persona pesa mas que nuestro propio criterio y madurez, entonces, la próxima vez no daremos un paso al frente sin que la otra persona lo apruebe y eso... es tan terrible como solo puede serlo encargarle nuestra vida a otro.

Independientemente de que creas o no (Ateo, Agnóstico  Cristiano Pendecostal, Hare Krishna y paren ustedes de contar), si no te da la regalada gana de pararte una mañana para ir a clases (asumiendo que eres un adulto maduro y ubicado en la vida) no habrá poder humano que te levante de esa cama (menos una madre histérica, ya eso es otro asunto), sino quieres salir adelante por tus propios medios, así tengas el apoyo de medio mundo (y no hablo solo del apoyo económico, sino del emocional, del espiritual, etc, etc, etc.,) no lo harás porque simplemente nadie sabe que quieres tú en la vida más que tu y nadie puede vivir tu vida por ti sino tú.

Por eso creo, por muy egoísta que suene, que atar tu futuro a otra persona o a otras personas es una decisión destinada a la frustración, pero decisión es decisión y debe respetarse así no nos cuadre.

Pero, si estas claro que quieres para ti, que esperas de ti, y confías en ti, llegará un momento en que serás agradecido por el apoyo que te han dado, por los momentos de compañía e incluso por los regaños y las haladas de orejas cuando hizo falta, pero tu mayor satisfacción sera que hiciste algo por y para ti y que en el atardecer de tu vida dirás "Hice lo que quise y quise lo que hice"

Por eso cada mañana, levántate y di frente al espejo "¿Que seria de mi sin mi?"